Al igual que en muchos países de Latinoamérica en Chile se celebra la pascua de resurrección a través de la gastronomía, por ejemplo, en Perú se acostumbra comer ceviche, en México se comen los romeritos y en Bolivia se acostumbra comer 12 platos sin carne.
En Chile se preparan platillos como el pescado frito con chilena, un clásico de cualquier picada costera, el curanto en olla un clásico en el sur del país, así como también las manzanas picadas o el pastel de manzana y queso. Otra alternativa son las empanadas de mariscos ya sean fritas o de horno son una sabrosa sugerencia a la hora de comer durante esta festividad.
Esta fecha es una oportunidad para cambiar hábitos y comenzar a incluir mayor variedad de alimentos a la dieta. Aquí te contamos más y te damos algunos consejos.
Todo es cuestión de creatividad, por ejemplo, puedes preparar una lasaña de verduras, pastel de papas, pastas con bolognesa usando carne vegetal o champiñones.
Atrévete a cocinar deliciosas sopas como el caldillo de mariscos que aporta mucha energía especialmente en las épocas de clima frío.
Otro favorito de la familia chilena es el caldillo de congrio. Si buscas una sopa para esos días de calor te sugerimos la sopa de Palta, Apio y Centolla.
Siguiendo con el menú a base de pescados y mariscos, prueba un delicioso salmón ahumado que puedes acompañar con una ensalada cruda o cocida y arroz blanco.
Como una sugerencia económica, accesible y versátil, están los diferentes tipos de tortitas o croquetas, puedes hacerlas únicamente con verduras como la zanahoria, cebollín, papa, brócoli, coliflor y también puedes prepararlas las croquetas de atún fresco o enlatado.
Aprovechando la variedad de mariscos que posee Chile, nada mejor que una paella de mariscos con almejas y langostinos.
En cuanto a postres, tenemos los deliciosos buñuelos, que son una masa frita suave y aireada, espolvoreada de azúcar, a tus hijos les encantara!
Y finalmente te damos una receta de alfajores al estilo chileno.
En esta época de recogimiento y meditación alimentemos el espíritu con la fe, el alma con el amor de los nuestros y el cuerpo con las múltiples opciones que la maravillosa gastronomía chilena nos ofrece.